La fisura labio-palatina es una de las malformaciones congénitas más frecuentes que afecta a nivel mundial. Ocurre cuando uno o más procesos embriológicos faciales no se unen con los adyacentes; las estructuras de la boca se forman en los primeros meses de embarazo. Durante ese tiempo, las partes del paladar superior y el labio superior normalmente se unen. Cuando esta unión no ocurre, el bebé tiene un labio leporino y/o paladar hendido. Un niño puede tener labio leporino, paladar hendido o ambos. Existe controversia sobre las causas de las fisuras labio palatinas, si bien lo más comúnmente aceptado es que se trata de una malformación genética influida por diferentes causas ambientales, trastornos del metabolismo del ácido fólico, factores nutricionales, exposición a tóxicos, drogas… El tratamiento de esta malformación ha ser multidisciplinar y la familia debe formar parte del mismo desde el inicio. Podemos ordenar las fisuras en 3 tipos diferentes:
FISURA DEL LABIO
Una fisura en el labio puede ser completa o incompleta involucrando un solo lado (unilateral) o ambos lados (bilateral). La encía superior (alveolo) y la nariz pueden también verse afectados.
FISURA PALATINA
La fisura del paladar afecta alguna o toda la parte del paladar blando y puede alcanzar al paladar duro hasta llegar cerca de la zona posterior del alveolo. En algunos casos, podemos ver una pequeña división a nivel de la úvula (úvula bífida) constituyendo la mínima expresión de una fisura.
Las personas con fisura palatina son más proclives a padecer pérdidas auditivas. Estas se producen como consecuencia generalmente de otitis serosas a causa de la falta de un drenaje suficiente a través de las trompas de Eustaquio y de la acumulación de fluido en el oído medio, lo que aumenta el riesgo de infecciones. A veces, tras la reparación quirúrgica del velo del paladar, éste es insuficiente (longitud, elasticidad, etc.) para llegar a la pared rinofaringea y esto da lugar a la nasalización del habla (rinolalia abierta).
FISURA DE LABIO Y PALADAR
La fisura completa de labio y paladar envuelve uno (unilateral) o ambos (bilateral) lados del labio, base de la nariz, encía y paladar.
La logopedia es la disciplina que colabora con la medicina, la cirugía maxilofacial y la odontología, complementando el tratamiento ya que mediante técnicas concretas y masajes, ayuda a mejorar la musculatura orofacial y sus funciones. Concretamente deberá intervenir en la rehabilitación del habla a través, entre otras cosas, de una reeducación respiratoria y terapia miofuncional (encaminada a lograr la funcionalidad de labios, lengua, mandíbula, velo del paladar …).